Añadir leyenda |
Cada día estamos expuestos a pequeñas cantidades deformaldehído, ya que su molécula es una de las más presentes en nuestra vida. Cualquier forma de vida orgánica produce formaldehído. Se encuentra presente tanto en el aire (contaminación medioambiental por combustión de carbón, gases procedentes del tubo de escape de los vehículos, tabaco, cocinas, hornos a gas, chimeneas
), como en ciertos alimentos y varios productos de consumo. Nuestro cuerpo (al igual que otros animales y plantas) también produce pequeñas cantidades de formaldehído de forma natural, como parte de su proceso metabólico. Sin embargo, debido a su volatilidad, se descompone rápidamente en el cuerpo y en la atmósfera, ya que se degrada en presencia de la luz solar en CO2 y H2O. De esta forma, no se acumula en el ambiente o en los seres vivos.
¿Qué es el formol?
El formol, formaldehído o metanal es un compuesto químico altamente volátil y muy inflamable. Su fórmula es H2 C=O (un átomo de carbón unido a dos átomos de hidrógeno y unida a un átomo de oxígeno). Su descubridor fue el químico alemán August Wihelm von Hofmann, en 1867. Se le conoce también como metaldehído, óxido de metileno y oxometano.
El formol se obtiene por oxidación catalítica del alcohol metílico. A temperatura normal es un gas incoloro de olor penetrante. Son sus disoluciones acuosas las que se conocen como formol, que es un líquido incoloro de olor penetrante y sofocante. El formaldehído se disuelve en agua (400 L de gas / L de agua a 20 ºC). A pesar de ello, no dura mucho en el agua y la mayor parte del formaldehído en el aire se degrada durante el día. Su oxidación da ácido fórmico y, en una segunda etapa, su resultado es agua y dióxido de carbono.
¿Cuál es su aplicación?
El formaldehído es uno de los compuestos orgánicos básicos más utilizados por la industria química, dado su gran poder antiséptico, desinfectante y conservante. Es usado en un sinfín de productos: papel, madera contrachapada, abono, resinas, ciertos alimentos, antisépticos, medicamentos, diferentes productos de consumo del hogar como alfombras, telas, fibras de vidrio
Su uso más popular, no obstante, es para la conservación de cadáveres y de muestras biológicas.
¿Es peligroso?
El uso y manipulación de estos productos se ha prohibido en algunos países debido al alto riesgo para la salud de quienes trabajan con ellos habitualmente. El uso del formaldehído puede producir irritación en la piel, ojos, nariz y garganta. Si se ingiere en grandes cantidades puede causar dolor, vómitos, coma e incluso la muerte a partir de 30 ppm o miligramos por litro.
¿Produce cáncer?
El formaldehído es un factor de riesgo laboral de tipo químico, ampliamente estudiado, cuyos efectos tóxicos dependen de su concentración (expresada en ppm) y del tiempo de exposición al mismo. Estudios epidemiológicos no han demostrado ninguna relación causa-efecto sobre los casos de cáncer estudiados, aunque sí indicios. En experimentos con animales se ha demostrado que produce cáncer en concentraciones continuadas superiores a 6 ppm en el aire respirado. Sin embargo, para la OMS, estos indicios son suficientes para considerar cancerígeno al formaldehído. Según un estudio de 2004 para evaluar el riesgo carcinogenético para los humanos del formaldehído, la mortalidad por cáncer de cavum aumentaba de forma estadísticamente significativa en trabajadores de fábricas expuestos a formaldehído, y concluyeron que había suficientes evidencias para afirmar que el formaldehído causa este tipo de cáncer. También la mortalidad por leucemia se incrementaba en embalsamadores, trabajadores de funerarias, patólogos y anatomistas. El Grupo de Trabajo concluyó que hay una fuerte sospecha, pero no certeza clara para establecer una relación causal entre leucemia y exposición profesional al formaldehído. También concluye que hay indicios limitados sobre el formaldehído como causa de cáncer nasosinusal.
El uso del formaldehído en peluquería
La utilización del formaldehído como conservante en la formulación de diferentes productos cosméticos y capilares es normal. Se usa en champús, productos de higiene femenina íntima, cremas de baño, etc
Sin embargo, ha sido el uso del formol en tratamientos de queratina los que han producido una alarma generalizada en nuestro sector.
El uso del formaldehído es empleado en estos tratamientos para romper los puentes cistínicos, que son los que dan forma al cabello y su resultado es un alisado más permanente.
El uso del formaldehído es empleado en estos tratamientos para romper los puentes cistínicos, que son los que dan forma al cabello y su resultado es un alisado más permanente.
La alarma se produjo a raíz de varios casos de intoxicaciones (mayoritariamente en Sudámerica) por el uso del formol en alisados permanentes. La mala praxis, la manipulación errónea y la fabricación casera de estos tratamientos, junto a productos de dudosa calidad con concentraciones superiores al 2% de formaldehído fueron el detonante. Las autoridades competentes de varios países empezaron a tomar medidas prohibiendo su uso o reduciendo drásticamente la concentración de formaldehído permitida en sus composiciones. Pero la noticia corrió como la pólvora por Internet y otros medios, dando una imagen muy negativa del formol. A partir de ahí, empezó a relacionarse formol con cáncer, y las empresas fabricantes empezaron a eliminar este componente de sus productos por el temor al rechazo generalizado.
Sin embargo, en la Comunidad Europea su uso está muy controlado y regulado. Los productos con concentración de formaldehídos tienen cantidades mínimas no perjudiciales para la salud. Según la directiva europea 76/768/EEC, los productos cosméticos con menos del 0,2% de su composición en formol, no tienen por qué declararlo, al no ser considerado una cantidad perjudicial para la salud. Por encima de esta cantidad, están totalmente prohibidos.
No obstante, si un producto produce picor en los ojos y nariz durante el tratamiento, seguramente sea un efecto producido por el exceso de formol en su composición. Por este motivo, y antes de aplicar un producto es recomendable estudiar el producto que se va a aplicar, la marca, de dónde precede, los permisos sanitarios, etc, porque hay muchos productos dudosos que pueden contener un porcentaje muy elevado de formol y ser tóxicos.
No obstante, si un producto produce picor en los ojos y nariz durante el tratamiento, seguramente sea un efecto producido por el exceso de formol en su composición. Por este motivo, y antes de aplicar un producto es recomendable estudiar el producto que se va a aplicar, la marca, de dónde precede, los permisos sanitarios, etc, porque hay muchos productos dudosos que pueden contener un porcentaje muy elevado de formol y ser tóxicos.
Como la toxicidad del formaldehído es consecuencia directa a su exposición, se recomienda al profesional el uso de mascarillas y una buena ventilación del local. El riesgo es mayor para el estilista porque, al planchar el pelo durante el tratamiento, el formaldehído se libera en forma de vapor, lo cual puede causar alergia en la piel, ojos y sistema respiratorio.
function onYtEvent(payload) {
if (payload.eventType == 'subscribe') {
// Add code to handle subscribe event.
} else if (payload.eventType == 'unsubscribe') {
// Add code to handle unsubscribe event.
}
if (window.console) { // for debugging only
window.console.log('YT event: ', payload);
}
}
No hay comentarios:
Publicar un comentario